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Una vez mas quedó ratificado que el jugador de Voka no está hecho para la selección (Argentina), y mucho menos si estos están comandados por Alfio Basile, a quien parece que la excesiva ingesta de whisky le ha alterado sus facultades mentales. De otra manera no puede comprenderse la presencia de ciertos jugadores en el seleccionado nacional.

El caso emblemático es el de Juan Román Riquelme. Al parecer la Asociación del Futbol Argentino no contaría en su haber con carteles electrónicos para realizar cambios con el número 10 incluído. ¿Qué tiene que pasar para que este muchacho salga?, una vez mas (como es habitual) Riquelme no aportó nada a la selección Argentina. Lamentablemente en la redacción del diario Olé emitieron otro partido, esto fue lo que publicaron acerca del triste...

"Es el último bastión del Coco. El más importante.
Ya no sólo es irreemplazable: para Basile, Juan Román Riquelme es intocable. Podrá mover la clásica línea de cuatro a una más aggiornada línea de tres; podrá recoger el guante del Checho y hacerle un lugar a la ilusión de Di María; podrá resignar el mandamiento del nueve grandote y probar con los bajitos; podrá innovar desde su rol más de seleccionador que de entrenador... Lo que nunca podrá, salvo una catástrofe, es imaginar su Selección sin su bandera. No se lo perdonaría. Y más cuando delante de su sobretodo, el 10 juega para 5 y aún así es el hombre más ofensivo del equipo. Desde otro lugar, con un perfil más bajo, sin que todo gire a su alrededor, sin que el mundo pase por sus botines, Riquelme sigue siendo fundamental."

El texto precedente es simplemente inexplicable, lo único que deja claro es la impresionante campaña mediática que sostiene a Riquelme en el seleccionado. Por supuesto el hincha bostero promedio, es decir, bastante limitado, sale corriendo a comprar el diario para pegar este artículo la pared de su casa.

En cuanto al arquero, Basile cometió el error de poner uno recién a los 15 minutos de iniciado el encuentro. Abbondanzieri intentó ocupar esa posición en los primeros instantes del partido, pero a pesar de solo haber jugado unos minutos no quiso perder la costumbre y, por supuesto, se comió el gol habitual que suele regalarnos cada vez que viste los colores de la celeste y blanca. Afortunadamente para los argentinos, "el pato" (criollo) debió retirarse del campo de juego por una rotura de ligamentos en su rodilla... Pero al finalizar el partido nos enteramos que finalmente no había sido una lesión importante sino que simplemente "No fue nada grave. Es un corte, que se sutura y no pasa a mayores. Fuera de peligro" (explicó el cuerpo médico argentino). Pero según el propio Abbondanzieri "Es un corte muy grande, tuvieron que hacer varios puntos. Me va a demandar gran tiempo de recuperación" . Por supuesto que el arquero para salvarse del incendio ni lerdo ni perezoso pidió el cambio. Cualquier semejanza con esta situación es mera coincidencia.

Carlos Tevez hablaba de que le debían una alegría a la gente, pero tal vez confundido por su pasado en Voka, la alegría se la dio al público paraguayo al hacerse expulsar en el primer tiempo (una vez mas como lo hizo frente a Colombia en su partido anterior en la selección). Le hicieron creer que es el jugador del pueblo, pero en Argentina se lo recuerda por el cuarto gol a EEUU solamente. Para Basile es el 9 de área elegido, le faltaría si no es molestia, convertir algún gol de vez en cuando para ratificarlo.

También ha jugado Daniel Díaz, seguramente el Coco no tendrá el teléfono en su agenda de defensores como Nicolás Pareja, Federico Fazio o Ezequiel Garay quienes si acumularon méritos para dar el presente.

El miércoles hay una nueva oportunidad frente a Peru (anteúltimo en la clasificación) donde seguramente Riquelme convertirá un gol y seguirá la joda...